lunes, 20 de enero de 2014

Tenía la tristeza apunto de sangrarme, entonces me agarraste como si fuera el último abrazo y te quedaste conmigo un tiempo más, tú ya sabías que tenías eso dentro, el veneno.
Ahora no estás, hace demasiado tiempo que no estás, aunque parezca que ayer estuvieses a mi lado inyectándome vida.
Tú te quedaste conmigo, y yo te quise, te quiero, y te querré siempre. Aunque ahora sea una bastarda sin alas...

No hay comentarios: